El Colegio de Enfermería de Granada manifiesta su total apoyo a la huelga convocada por los sindicatos esta mañana, a la que han acudido a las puertas del Hospital Virgen de las Nieves alrededor de 300 profesionales sanitarios, mientras vitoreaban: “No se maltratan las manos que te cuidan”.
La sanidad pública en Andalucía está atravesando una deriva preocupante y las enfermeras juegan un papel crucial en este contexto, enfrentando numerosas dificultades.
“La falta de contratos y el maltrato a los profesionales de la salud son evidentes. Recientemente, la Consejera de Salud agradeció a padres, madres y niños por la alta tasa de vacunación contra el papiloma humano, sin mencionar a las enfermeras, quienes son una parte fundamental de dicha campaña”, manifiesta Jesús Villanueva, enfermero de familia.
La autonomía de los centros es prácticamente nula y las enfermeras se sienten como peones en un sistema que no les permite ejercer su profesión con la debida autonomía. La falta de oportunidades para avanzar en la carrera profesional y la inyección de 700 millones en la sanidad privada, mientras se desatiende a la pública, así como la falta de cobertura de vacantes de enfermería es alarmante; una muestra de cómo se está dejando morir el sistema sanitario.
Las directrices políticas están afectando negativamente a los pacientes, quienes deberían ser el centro para resolver esta problemática. Las enfermeras están recibiendo llamadas para incorporarse a turnos con muy poca antelación, lo que dificulta la organización de sus vidas.
Jesús Villanueva, enfermero de familia, afirma: «Se quieren merendar la sanidad pública poco a poquito», e incluso pone de manifiesto que no dejan ejercer sus competencias, «A veces pienso que estoy en la taquilla de un cine, toma el papelito y pase usted a ver la película. Somos enfermeras, no sé dónde quieren que vayamos».
Por otra parte, María del Carmen Morón, enfermera de urgencias, reclama más personal y medios. «Nos encontramos con una saturación en urgencias, atendiendo a pacientes en pasillos porque no podemos subirlos a planta porque están cerradas. Las jubilaciones y bajas no se cubren, y esto es especialmente grave en casos de bajas por maternidad. Es una situación para llorar».
Ante esta crisis de la enfermería Andaluza, Jacinto Escobar, presidente del Colegio Oficial de Enfermería de Granada, declara: «Estamos hartos del menosprecio a las enfermeras. Es una falta de respeto y consideración por parte de la consejería. Nos enfrentamos a una situación insostenible cada día como profesionales de la salud».
Desde el Colegio de Enfermería de Granada, insistimos en la importancia de una sanidad pública fuerte, que permita ejercer y desarrollar las competencias enfermeras, que asegure la calidad de vida, ya que nos preocupa la calidad asistencial y la seguridad del paciente, dado que como consecuencia puede dispararse la mortalidad, infecciones, errores en medicación…entre otras. Hacemos un llamado para que tomen medidas inmediatas y efectivas.