El sol es beneficioso para ciertas enfermedades dermatológicas y es imprescindible para la síntesis de la vitamina D, pero una exposición incorrecta puede provocar quemaduras, envejecimiento prematuro de la piel, manchas y un incremento en el riesgo de padecer cáncer de piel a medio y largo plazo. La AEMPS, consciente de los riesgos que presenta una inadecuada exposición solar, recomienda seguir los siguientes consejos para promover una exposición segura.
El sol es indispensable y necesario para la vida. Sin embargo, una exposición intensa o sin protección del sol puede provocar efectos negativos para la salud que pueden derivar bien en quemaduras de la piel, lesiones oculares, envejecimiento, manchas y cáncer de piel.
Por ello, aprovechando la llegada del verano, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), consciente de los mencionados riesgos, ha publicado una serie de recomendaciones con el objetivo de promover una exposición solar segura.
Recomendaciones para una exposición solar segura
El primer consejo de la AEMPS pasa por no permanecer demasiado rato al sol. La exposición excesiva al sol es perjudicial para la salud. Puede provocar quemaduras y envejecimiento de la piel y es un factor de riesgo para el cáncer de piel
En este sentido, también es recomendable evitar la exposición solar entre las 12 y las 16 y no olvidar protegerse también los días nublados.
Además, la agencia recuerda que todos los tipos de pieles necesitan protegerse del sol. Lo ideal es que cada persona elija un protector solar apropiado para su piel y para cada zona del cuerpo, que proteja al menos frente a radiación UVA y UVB.
¿Cómo usar el protector solar?
Es importante utilizar suficiente protector solar para lograr una cobertura adecuada. Para ello, se debe extender el producto de manera abundante y uniforme sobre la piel seca. La cantidad necesaria que recomienda la AEMPS son, aproximadamente, dos líneas extendidas en los dedos para proteger la cara y dos cucharadas para el cuerpo (30ml)
En añadido, la Agencia recuerda que el producto debe aplicarse al menos cada dos horas. Además, de esparcirse siempre después de bañarse, secarse o sudar.
Por último, se debe extremar las precauciones en las partes del cuerpo más sensibles como son cara, labios, cuello, calva, hombros, escote, orejas, manos y empeines.
Otros factores
El uso únicamente de crema solar no es suficiente. Cobra especial relevancia protegerse con medidas añadidas como el uso de prendas de ropa, sombreros y gafas de sol.
La hidratación es otro factor clave en la exposición solar. La Agencia recomienda beber agua con frecuencia y utilizar cremas hidratantes tras la exposición solar.
Exposición solar en la infancia
La infancia es especialmente sensible a la exposición. Por ello, en esta campaña, la agencia recuerda la necesidad de usar solares con Factor de Protección Solar alto, que sean especiales para ella y resistentes al agua, además de siempre evitar la exposición al sol de menores de tres años.